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Cerdeña es una tierra maravillosa. La belleza de la naturaleza y de las obras del hombre construidas en perfecta armonía con ella, la hacen única. A pesar del saqueo, el abuso y la profanación sufridos durante milenios hasta hoy … la belleza de Cerdeña todavía puede conmovernos, sobrecogernos, y ofrecernos tantas cosas. Esta belleza es algo sagrado que pertenece no solo a cada habitante sino también a cada visitante que debe respetar, proteger y defender.
En todo el mundo, el hombre ha reconocido lugares especiales desde el albor de los tiempos, en que diferentes mundos se encuentran e interpenetran,y donde lo humano y lo divino entran en contacto, sea cual sea la forma, el nombre o la interpretación, que en las diferentes edades y culturas le da a la palabra «divinidad». Estos también son lugares que podríamos llamar sagrados.
En Cerdeña todavía es posible visitar muchos de estos lugares que alguna vez fueron venerados, durante siglos y milenios, y en algunos casos , venerados hasta ahora sin interrupción. Esto hace que, a todos los efectos, también desde este punto de vista sea una isla que bien podemos definir como «sagrada»… Pero dado que la definición misma de lo sagrado es un hecho cultural y subjetivo, en realidad no es posible poner límites a las posibles explicaciones de lo que hace de Cerdeña una tierra sagrada … todos encuentran su sentido de lo sagrado, algunos en el mar, algunos en las montañas y los bosques, algunos en nuraghes y algunos en iglesias y festivales … y, en última instancia, es sagrado ni más ni menos que todo el planeta Tierra, tan maravilloso y tan maltratado, y nos recuerda que no es necesario ir muy lejos para darse cuenta de cuánta belleza tenemos alrededor y convertirnos en sus guardianes.
Estoy convencida de que, donde sea que estemos en el planeta, al menos podemos tratar de entender todo lo que nos rodea y vivirlo no como espectadores o «turistas», sino poner nuestra atención y conciencia para saber, sentir, amar y hacerlo nuestro.
El patrimonio arqueológico, cultural y natural de Cerdeña, es hasta dia de hoy inmenso y por eso es importante comprender que este valor es un gran regalo para quienes tenemos la oportunidad de vivirlo.
Texto original www.sardegnacra.it
Traduccion y adaptacion Nany Salcedo